GEXXI - SAL DE REMOLINOS, FORASTERO.


En esta ocasión, a través del GEXXI, se ha coordinado la visita a varias minas de sal abandonadas en Remolinos (Zaragoza). El pueblo está situado cerca del río Ebro, en su orilla izquierda.

Hemos participado cuatro compañeros, llegando a nuestro destino el viernes al anochecer e iniciando el regreso a casa, el mediodía del domingo. La gran extensión de las minas y el interés del paisaje exterior aconsejaban una estancia más amplia o el regreso futuro para visitar las minas, casas y lugares que no nos ha dado tiempo en esta ocasión. Dado lo cansado que resulta dedicar tantas horas a la actividad de búsqueda y visita, creo que es mucho mejor dividir la actividad en más de un fin de semana.

El contenido de este artículo (imágenes y texto) es, en parte, de producción propia y en parte facilitada por personas del lugar que nos han transmitido información de manera verbal y gráfica. Gracias a todos los que, de una forma u otra, han colaborado para que el artículo tenga una cierta amplitud. En todo caso, para agilizar la lectura y como licencia literaria, expondré todo en primera persona.

El entorno de la zona minera (la Escarihuela) presenta unas características semidesérticas, con vegetación baja y fuerte presencia de erosión, encontrándose algunos torrentes de dimensiones considerables. La formación salina tiene más de 100 metros de espesor y está encajada en yesos. La ductilidad de los materiales permitieron la construcción de numerosas viviendas excavadas en la montaña (casas cueva), tipo de vivienda que podemos encontrar en diversos lugares de la geografía española.

Casa-cueva.

El paisaje en los alrededores de Remolinos.
Caminando por el barranco.

Paisaje de la zona de las minas.

Recorriendo la zona, guiados por un compañero que había estado anteriormente en la minas, hemos podido ir encontrando y visitando varias de ellas, todas con algunas características que las hacen diferentes entre si.
La más pequeña era simplemente una galería horizontal de unos veinte metros que nos obligaba a avanzar de rodillas sobre un manto de arcilla con una ligera capa de sal cubriéndola. Simplemente curiosa.
La mina más pequeña que visitamos.
En general, las otras minas de dimensiones bastante mayores y que necesitan algunas horas para ser visitadas, presentan una pequeña construcción a la entrada.
En un caso un edificio semiderruido con toda la maquinaria para extraer y moler el mineral, conservándose, aún, restos de los raíles que había en su momento.
En algún otro caso simplemente hay una pared de ladrillo o un pórtico de piedra para poder cerrar la mina en los momentos en que nadie trabajaba o para obtener un pequeño resguardo del exterior.

Entrando en la 1ª mina que visitamos.

No podemos ver muchas estalactitas.



Encontramos mucho calzado en varias minas.

Murciélago en el sueño eterno.


Una de las galerías.

Por fin fuera. Dentro había una intensa olor a guano.
Característico, en todos los casos, son las numerosas paredes de piedras que franquean los lados del “camino” y que servían para proteger la estructura y de paso, es de suponer, apartar el mineral no aprovechable. En general estas paredes se conservan en buen estado pero algunas presentan derrumbes parciales pero, aparentemente, sin gran peligro si se va con cuidado. También es frecuente la presencia de más de un  nivel de trabajo, que se salva bien por escaleras, pozos o simplemente rampas que nos llevan a otras galerías.

Edificio de maquinaria.

Maquinaria vista desde el exterior.

Maquinaria vista desde una boca de la mina.
Vista de los raíles, entrada de personas y salida de mineral.

Menudo susto... estaba despistado con mis pensamientos...

Rocas haciendo paredes para apuntalar.
Entrada a otras dos minas.

Cajas vacías de Sal Eros...


Restos de un carburero.
Mención especial merece la mina “La Real” por sus dimensiones descomunales, con una parte más antigua y en estado precario por los múltiples derrumbes de paredes y losas del techo y que supone un riesgo evidente de accidente. Quien se meta en esta zona debe ser consciente de hasta donde quiere arriesgarse, es mucha casualidad que caiga algo cuando pasas pero puede pasar, más aún al tocar alguna pared sin darnos cuenta. En su momento se habían utilizado animales de tiro para transportar el mineral hacia el exterior y aún se pueden encontrar restos de paja. En esta zona parece que se pueden encontrar grandes formaciones de estalactitas, prácticamente ausentes en el resto de la mina. A pesar de la gran solubilidad del mineral, la formación de estalactitas de halita en el interior de las minas es poco frecuente dada la escasez de filtraciones de agua, no solo en esta mina si no también en las otras minas de la zona


Sacos con mineral.

Capazo. En varias minas pudimos encontrar restos.


Aparte de estas galerías antiguas, en el resto de la mina las galerías son inmensas, tanto por longitud como por anchura, siendo la altura de varios metros. No es difícil pensar en las grandes galerías que encontramos por Cantabria. El suelo completamente liso hace cómodo el deambular por las galerías. La gran cantidad de galerías laterales, que cruzan la principales, hacen que sea fácil perderse, ya que lo que encontramos es un verdadero laberinto.
Aún se puede ver un camión Pegaso abandonado en el interior de la mina, cerca de la entrada. Más al interior hay otro camión y una máquina cargadora detrás de él. También quedan numerosos restos de despiece de maquinaria, bidones de aceite, objetos varios, basura diversa, etc. Hasta hace unos pocos años se podía encontrar un SEAT 1500 que había pertenecido a un directivo y un autobús usado para transportar a los trabajadores, ambos habían quedado atrapados tras un derrumbe.

Imagen característica de La Real.


Siempre han existido los grafitis.

Camión abatido por estar abandonado...
Una galería curiosa.

Bellezas de las profundidades.

¿Quien pone orden aquí?...




Esta mina estuvo en funcionamiento hasta el día 5 de mayo de 1989. Unos años más tarde, en 1995, se iniciaron los trabajos para comunicarla con la mina María del Carmen, para mejorar la ventilación en esta última. La unión de las dos minas permite, aparte de la citada mejora en la ventilación, disponer de una salida de emergencia.
Si la mina La Real tiene dimensiones espectaculares, la mina María del Carmen, supera las anteriores al disponer de “pilares artificiales” para sostener el techo. Los más antiguos son de madera y los nuevos de metal. El uso de esta técnica permite no dejar tantos pilares naturales, pudiendo aprovechar más cantidad de material y obteniendo de esta manera espacios diáfanos mucho mayores. Ésta es actualmente la única mina en funcionamiento en Remolinos y la sal que se extrae se usa, principalmente, para el deshielo de carreteras. Otra parte se disuelve en agua, y la salmuera obtenida se evapora en salinas. De esta forma se produce sal comestible. También se elaboran bloques de sal para alimentación del ganado.

Salinas para obtener sal de mesa.
Hemos tenido un par de anécdotas dignas de mención y recuerdo para el futuro, una el sábado y otra el domingo. Está última, por diversos motivos (entre ellos, una promesa), no se puede explicar públicamente (lástima porque es muy divertida), pero la del sábado si. Nos encontramos a un chico y una chica en la entrada de una de las minas y nos dijeron que nos habían visto caminando por el barranco desde lejos. Con nuestra indumentaria: mono, mochila en la espalda y casco en la mano. En principio pensaron que seriamos motoristas pero al no ver ninguna moto llegaron a la conclusión de que eramos PARACAIDISTAS!!!!!!!!!!!. En realidad tiene su lógica, alguien caminando con esa pinta en medio de una zona semidesértica o es un extraterrestre o un paracaidista. Por cierto, si leéis esto, muchas gracias por darnos vuestra botella de agua cuando a nosotros nos quedaba muy poca y aún teníamos por delante varias horas de exploración.

Hemos sido muy bien acogidos por las gentes de Remolinos y en ningún momento nos han dicho: Sal de Remolinos.


BREVES APUNTES HISTÓRICOS.

Se cree que las minas de sal de Remolinos fueron explotadas ya en época romana, o incluso anteriormente. Al final de la Edad Media se explotaban de las minas de forma intensa por cuenta de los reyes de la Corona de Aragón. Felipe II, en 1564, incorporó todas las salinas y minas de sal a la Corona, expropiando las pertenecientes a particulares y estableciendo así por primera vez un monopolio efectivo. A finales del siglo XVIII, la sal se mantenía como una de las mejores rentas de la Corona.

En 1859 se publicó una Real Orden mandando demarcar la mina de sal explotada por el Estado en Remolinos (que será llamada "La Real") y también la de Torres de Berrellén.
Entre las primeras concesiones de minas de sal otorgadas a particulares se encuentra, demarcada en 1857, la mina "La Cesarita", en Remolinos. Posteriormente se otorgarían nuevas concesiones por particulares y pequeñas empresas, a lo que seguirá, posteriormente, un proceso de concentración.

En 1873 había ocho minas en Remolinos y cinco en Torres de Berrellén. En 1888, además de las dos minas explotadas por cuenta del Estado había ya más de cien a cargo de particulares

El transporte siempre había sido un problema muy importante ya que no había ningún puente sobre el río Ebro en todo el trayecto hasta Zaragoza, y el río se cruzaba utilizando barcas lo que dificultaba mucho su llegada hasta las estaciones de ferrocarril más próximas, todas al otro lado del Ebro. En 1901 se instaló un cable de transporte entre la mina "La Real" y la estación de Pedrola, dividido en dos tramos.

La mina más importante y mejor explotada era "El Ángel". Se explotaba por el método de huecos y pilares, rellenando las cámaras resultantes con escombro. Para el transporte se había practicado un pozo de 30 metros que comunicaba con una galería de transporte situada a nivel inferior y dotada con un pequeño ferrocarril minero con salida junto a la planta de tratamiento y las salinas.

En el año 1909 se tiene constancia de 59 minas y 4 demasías, pero solamente se explotaban con cierta intensidad la mina una decena de ellas.
En 1926, se explotaban siete minas de sal en el término de Remolinos. Aún así la producción va aumentando progresivamente a lo largo de la década, mientras que, paralelamente, tiene lugar un proceso de concentración en el que las pequeñas explotaciones familiares van siendo absorbidas por las empresas grandes.

En la década de los 50 se introducen grandes mejoras en las instalaciones. En la mina "La Real" se instala alumbrado eléctrico mediante tubos fluorescentes, así como un sistema de plano inclinado con vagonetas movidas mediante un cabrestante eléctrico. En las décadas siguientes continuaría incrementándose la producción.

En resumen, otro fin de semana fantástico descubriendo nuevos paisajes en el subsuelo, aunque esta vez creados a partir del esfuerzo humano. Debía ser duro trabajar en el interior de estas minas, especialmente en la época que todo el trabajo era manual.
Espero que alguien sea capaz de conservar este patrimonio para el futuro disfrute de las siguientes generaciones.
Quiero dar las gracias a mis compañeros de actividad y reiterar el agradecimiento a las diferentes personas que nos han ayudado en nuestro conocimiento y nos han facilitado información acerca del entorno en que nos estábamos moviendo.

6 comentarios:

mar dijo...

las fotos de la casa-cueva y la maquinaria de que mina son ?

Joan Montoya dijo...

Hola Mar.
La casa cueva está, junto a otras, a la salida del pueblo muy cerca de las últimas casas, justo donde nosotros aparcamos los coches para recorrer toda la zona caminando. No te la sabría situar de otra manera.
La maquinaría es en la Mina Real, la más grande de la zona y por cuyo interior nos podemos mover con seguridad y comodidad por sus grandes dimensiones, excepto la parte peligrosa que menciono en el artículo.

Un saludo.

Juan Carlos dijo...

En esas minas han trabajado, mis abuelos, mi padre y casi toda la familia cuando yo fui chico. muy bonitas vuestras fotos.
Un saludo

Anónimo dijo...

Curioso el 1500 y el autobus atrapados.deberian llevar ahi muchos años y se veian relativamente bien. Sabes como los sacaron de ahi? Por que facil no seria.si no lo hubieran hecho en su momento

Unknown dijo...

hola muy buenas llevamos varios dias haciendo la ruta, solo encontramos minas como dices tu que no paras de andar jeje nos gustaria poder saber donde esta la entrada que entras a donde la maquinaria en la mina real podria ser? muchisimas gracias

Joan Montoya dijo...

No recuerdo. Han pasado muchos años. Lo siento.