BTT / CASTELLS DE FRONTERA


Otro fin de semana, otra actividad. En esta ocasión tocaba ir en bicicleta. Con poca necesidad de organización, sin problemas, sin tener que dar explicaciones a nadie. Posiblemente el futuro vaya por aquí...
La propuesta ha sido, como es bastante habitual, de Jordi Riera y nos hemos apuntado tres personas más, otro Jordi, Ramón (la primera vez que nos acompaña, espero que no sea la última) y yo mismo. Además, el primer día y durante unos kilómetros contamos con la presencia de Pere y además pudimos compartir la comida con Miquel, Lidia y Biel, siempre contando con nuestro soporte logístico durante todo el fin de semana, Marta.
Gracias a todos por vuestra aportación para un fin de semana muy interesante.
La ruta denominada "Els Castells de Frontera" está basada en la información recogida en las dos páginas siguientes:
Como la información allí expuesta es muy amplia no profundizaré en demasía en datos sobre el itinerario o los lugares que encontramos a nuestro paso.
Aunque encontramos alguna señalización durante la ruta, es totalmente insuficiente y, por ello, imprescindible disponer de un GPS y el track que podemos descargar de internet. Éste solo presenta un pequeño error en un tramo en obras, pero no supone ningún problema buscar una alternativa que pasa a escasos metros del tramo propuesto.
El trazado original es de 92 Km pero, con las variantes que hemos hecho, la distancia total recorrida sobre nuestras bicicletas ha sumado 110 Km. y el perfil con numerosos desniveles.

El sábado iniciábamos el recorrido en Castellfollit de Riubregós, después de un buen desayuno. Al poco encontrábamos un cartel que ponía “En festa” y hacia allí nos dirigíamos, después venía la aclaración “En festa mol sosa”, decidimos que era mejor olvidarse de la fiesta y seguir el camino programado.
No era una fiesta divertida...
 La primera parada fue en la iglesia románica de Santa Fe de Calonge y en el Castillo de Calonge de Segarra.


 
El siguiente destino fue el Castillo de Boixadors.



En Prats de Rei, disfrutábamos de la comida con el grupo de "esporádicos" citados al principio.

De nuevo en marcha nos dirigimos a la Torre Medieval de La Manresana, levantada entre finales del siglo XI y principios del siglo XII. Imponente con sus 21 metros de altura.


Tras una larga subida hasta la Serra de Rubió, donde pudimos contemplar los imponentes aerogeneradores allí instalados, seguimos hacia nuestro final de etapa, fuera del recorrido “oficial”. Cuando empezó a oscurecer llegamos al Hotel América de Igualada donde pasaríamos la noche. Después de una ducha fuimos a dar una vuelta por Igualada y a hidratarnos en un bar,  posteriormente una cena para recuperar fuerzas y a dormir.

El domingo, después de un buen desayuno iniciamos de nuevo la ruta. El día perfecto, climatológicamente hablando, para ir en bicicleta. Al cabo de un par de horas otra parada para desayunar.



 

Otra pausa para contemplar las vistas desde la iglesia de la Mare de Déu de Collbàs.



 
Una larga parada visitando la iglesia románica de Santa Maria de la Tossa y contempando su entorno.


Dedicado a ella.
 



Ya solo faltaba llegar a Santa María de Miralles, donde una opulenta comida daba por finalizadas dos jornadas intensas de bicicleta.

Por la tarde aún me quedó tiempo para dar una vuelta por la Fira de l'Aixada de Manresa.

3 comentarios:

Josep Herrerías dijo...

De nou gràcias per mostrar-nos aquest paisatges i esglesies. Molt guapa la romànica. Prenc nota.

Ramón Martín Cabeza dijo...

Muchas gracias por el relato, Joan. No sabes cuánto trabajo me has ahorrado al facilitarme resumirlo todo con un simple enlace.

Por cierto, admiro tus cualidades como fotógrafo y no dudes que, si se me invita, repito. La experiencia fue más que gratificante.

Ramón Martín Cabeza dijo...

Por cierto, me olvidaba de hacer un reconocimiento público a la pareja liante: Jordi y Marta. Se lo curraron de lo lindo para que todo fuese como fue.