Otro fin de semana apasionante junto con los compañeros del GEXXI e invitados. En esta ocasión hemos ido a la provincia de Valencia.
El viernes salíamos de Manresa dos personas, una hora más tarde nos encontrábamos en Gavà con otros tres compañeros y hora y media mas tarde nos juntábamos en un área de servicio de la autopista con otro coche procedente de Sabadell y Barcelona. Pasada la medianoche llegábamos a Ontinyent, donde teníamos reservada una casa para todo el fin de semana.
El sábado los ocho espeleólogos del GEXXI nos dirigimos al Real de Gandia donde habíamos quedado con otro compañero del grupo y siete amigos suyos, todos de Tarragona. Allí también se nos unían nuestros contactos de la zona, Ricardo y Miquel.
Los 17 espeleólogos y espeleístas nos dirigimos a nuestro objetivo matinal, la CUEVA DE LA AUTOPISTA. Guiados por Miquel penetramos en esta calurosa y entretenida cueva situada en un lateral de la autopista. Recibe este nombre debido a que fue encontrada a partir de las obras realizadas para su construcción.
Se trata de una cueva laberíntica y muy divertida por sus continuos cambios de sentido y variedad de posturas (pasos estrechos, trepadas, destrepadas,…). Pudimos ver tres salas especialmente atractivas por la gran cantidad de formaciones, destacando el siempre encantador aragonito.
El viernes salíamos de Manresa dos personas, una hora más tarde nos encontrábamos en Gavà con otros tres compañeros y hora y media mas tarde nos juntábamos en un área de servicio de la autopista con otro coche procedente de Sabadell y Barcelona. Pasada la medianoche llegábamos a Ontinyent, donde teníamos reservada una casa para todo el fin de semana.
El sábado los ocho espeleólogos del GEXXI nos dirigimos al Real de Gandia donde habíamos quedado con otro compañero del grupo y siete amigos suyos, todos de Tarragona. Allí también se nos unían nuestros contactos de la zona, Ricardo y Miquel.
Los 17 espeleólogos y espeleístas nos dirigimos a nuestro objetivo matinal, la CUEVA DE LA AUTOPISTA. Guiados por Miquel penetramos en esta calurosa y entretenida cueva situada en un lateral de la autopista. Recibe este nombre debido a que fue encontrada a partir de las obras realizadas para su construcción.
Se trata de una cueva laberíntica y muy divertida por sus continuos cambios de sentido y variedad de posturas (pasos estrechos, trepadas, destrepadas,…). Pudimos ver tres salas especialmente atractivas por la gran cantidad de formaciones, destacando el siempre encantador aragonito.
Después de algunas horas disfrutando del paisaje y pasando calor salimos al exterior y nos dirigimos, como no, a un bar. Allí, durante largo rato, intercambiamos opiniones y experiencias acompañados de unas bebidas y algo de comer.
En este punto nos separamos los diferentes grupos: Ricardo y Miquel se quedaban en la zona, los de Tarragona volvían a casa y los de Barcelona volvíamos a nuestra casa de Ontinyent.
Aún teníamos ganas de marcha, así que cinco de nosotros fuimos a hacer otra sima propuesta por nuestro compañero David, buen conocedor de las cavidades de la zona. En esta ocasión se trataba de la SIMA GRAN. Ya estaba oscureciendo cuando penetramos en un estrecho pozo de casi 30 metros que nos dejaba en un pequeña base donde nos esperaban dos sapos y numerosas arañas. Unos pocos pasos y se abría ante nosotros una sala de dimensiones considerables con bastante formación, algunos murciélagos y alguna pequeña sala anexa. Al tratarse de una pequeña sima nuestra exploración fue más bien corta pero intensa. Al salir nos esperaba la fina lluvia que también nos había acompañado en la entrada.
En este punto nos separamos los diferentes grupos: Ricardo y Miquel se quedaban en la zona, los de Tarragona volvían a casa y los de Barcelona volvíamos a nuestra casa de Ontinyent.
Aún teníamos ganas de marcha, así que cinco de nosotros fuimos a hacer otra sima propuesta por nuestro compañero David, buen conocedor de las cavidades de la zona. En esta ocasión se trataba de la SIMA GRAN. Ya estaba oscureciendo cuando penetramos en un estrecho pozo de casi 30 metros que nos dejaba en un pequeña base donde nos esperaban dos sapos y numerosas arañas. Unos pocos pasos y se abría ante nosotros una sala de dimensiones considerables con bastante formación, algunos murciélagos y alguna pequeña sala anexa. Al tratarse de una pequeña sima nuestra exploración fue más bien corta pero intensa. Al salir nos esperaba la fina lluvia que también nos había acompañado en la entrada.
De vuelta a casa, una buena ducha, una cena rápida, pase de fotos, algún masaje y un sueño reparador, que nos acompañó hasta la mañana del domingo.
Domingo por la mañana. En esta ocasión toca ir al TUNEL DEL SUMIDOR y somos ocho los espeleólogos participantes. David nos guía hasta la boca de la cavidad. Ya desde fuera se oye el ruido del agua. Un pequeño destrepe nos deja en una pequeña sala. Seguimos aguas abajo. No vale la pena sortear el agua porque sabemos que nos mojaremos enteros. La cavidad es muy entretenida, con tramos de fácil caminar y otros en los que tenemos que ir salvando desniveles. Cuando llegamos al primer sifón vimos que había suficiente espacio para pasar, eso si, quitándonos el casco para no tener que sumergir la cabeza. Continuamos en curso del agua hasta la cabecera del primer pozo. Justo debajo de la instalación se había producido un desprendimiento que había quedado muy inestable lo que nos aconsejo no bajar por allí. En un lateral encontramos otra instalación, así que montamos cuerda y descendimos en medio de una cortina de agua. Un pequeño replano y después otro pozo. Una vez en la base caminamos por la sala pero decidimos no seguir la exploración. Se habían producido varios derrumbes y el suelo era bastante inestable y era de suponer que el techo también. Los cuatro que llegamos hasta este punto iniciamos el camino de vuelta, contentos de haber visitado esta especie de parque acuático excavado en yesos.
Una vez en nuestra casa base, comimos, recogimos las cosas y miramos algunas fotos. Iniciamos el camino de retorno pasadas las cuatro de la tarde, con la lluvia (que tanto nos había respetado para realizar nuestras actividades) acompañándonos durante todo el camino.
En resumen. Un fin de semana con mucha actividad espeleológica, con muy buena compañía y aprovechado al máximo. Este reportaje va acompañado de unas pocas fotos, que no son capaces de mostrar las bellezas que tuve a mi lado.
Desde aquí agradecer a Ricardo y Miguel Angel Guerrero (un artista, como podéis comprobar en su página http://www.rupestreguerrero.com/) su interés en enseñarnos la Cueva de la Autopista y a David por ocuparse de la infraestructura para dormir y guiarnos de forma directa a las diferentes actividades programadas.
Como siempre el GEXXI recibe abiertamente a todos aquellos que están interesados en nuestro proyecto de practicar espeleología y pasarlo y hacerlo pasar bien.
En resumen. Un fin de semana con mucha actividad espeleológica, con muy buena compañía y aprovechado al máximo. Este reportaje va acompañado de unas pocas fotos, que no son capaces de mostrar las bellezas que tuve a mi lado.
Desde aquí agradecer a Ricardo y Miguel Angel Guerrero (un artista, como podéis comprobar en su página http://www.rupestreguerrero.com/) su interés en enseñarnos la Cueva de la Autopista y a David por ocuparse de la infraestructura para dormir y guiarnos de forma directa a las diferentes actividades programadas.
Como siempre el GEXXI recibe abiertamente a todos aquellos que están interesados en nuestro proyecto de practicar espeleología y pasarlo y hacerlo pasar bien.
1 comentario:
Supongo que lo de belleza ira solo por J.C.C. jeje gracias por el finde!! a sido genial.
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