ESPELEOLOGÍA Y TECNOLOGÍA

1994

2008

Muchas veces en conversaciones entre espeleólogos ha salido el tema de la evolución de los materiales y técnicas aplicadas a nuestro deporte. Mi postura ha sido siempre de que desde el salto del electrón a la cuerda la evolución ha sido muy escasa y poco significativa.

En cuanto al vestuario, seguimos usando botas de goma o de montaña y un mono interior y exterior, solo se ha evolucionado algo en materiales, pero podríamos ir vestidos como hace 20 o 30 años y no notaríamos un cambio importante.

Respecto a otro elemento básico, como es la iluminación, seguimos usando el carburero, aunque cada vez se tiende hacia los LEDS, que después de bastantes años de evolución siguen sin tener una buena relación precio, volumen, iluminación, autonomía.

Los materiales duros de progresión son los mismos desde hace muchos años, tan solo han cambiado ligeramente los diseños. Quizá lo más destacado es la incorporación del bloqueador de pie, el Pantin, que nos facilita la progresión por la cuerda y el paso de los fraccionamientos volados. En cualquier caso, desde hacía años algunos espeleólogos utilizaban un bloqueador de pecho en el pie para hacer la misma función.

Otro elemento imprescindible es el casco, que prácticamente siguen siendo iguales desde hace muchos años, quizá un poco menos pesados y más fáciles de graduar.

La cuerda, esa compañera en la que confiamos nuestra vida, ha ido adelgazando poco a poco, pero con tanto esfuerzo como cuesta quitarse los michelines que nos acompañan durante todo el año. Hemos pasado de cuerdas de 10,50 mm. a cuerdas de 9 mm. para uso habitual, aunque ya hay cuerdas de 8,5 mm. e incluso 8 mm. pero con una mayor exigencia a la hora de instalarlas y una delicadeza superior para progresar por ellas.

Los materiales de anclaje son básicamente los mismos desde hace muchos años, los espits conviven con los químicos de más reciente introducción en nuestro ámbito. A mí me gustan más los espits porque te permiten una instalación más variada y creativa, tienes que pensar donde tocará la cuerda a la pared y buscar los espits. Una instalación en químicos es más evidente, son más fáciles de localizar y casi tienes la obligación de usar todos los que encuentras a tu paso. Ni que decir que los mosquetones y las chapas son los mismos desde hace muchos.

Situándome yo como referencia histórica (que atrevimiento por mi parte), si mañana me presento en una cueva con el material que usé hace 14 años cuanto me inicié en este mundo, nadie me miraría extrañado. Ver fotos al principo del artículo.

Somos un colectivo que podríamos comparar al de las personas que padecen las llamadas enfermedades raras (aquellas que afectan a un máximo de 1 de cada 2.000 ciudadanos), salvando las distancias porque todos preferimos ser espeleólogos a tener una de estas enfermedades, o cualquier otra. Casi nadie investiga medicamentos para tratarlas porque no es un colectivo rentable desde el punto de vista económico.

Nosotros tenemos la suerte de que muchos de nuestros materiales son útiles para otras actividades deportivas, lúdicas o profesionales. En este apartado nos podemos referir a los nuevos anclajes (procedentes de la construcción), a los elementos de iluminación (aptos para otros deportes y par un uso “civil”), a las cuerdas (descenso de barrancos, escalada, aseguramiento laboral, etc.).

Paradójicamente, la evolución de la espele ha venido por otros caminos más indirectos.
Sin ir más lejos no podrías leer este artículo si no existiese internet, porque yo quizá no lo hubiese escrito y tu, en caso de que si lo hubiese escrito, posiblemente no tendrías acceso al mismo. Internet también nos ha permitido tener mayor acceso a topografías y a información variada de las simas. Ha permitido un proyecto como el GEXXI que une a diferentes espeleólogos de ciudades variadas, etc.
El teléfono móvil nos facilita contactar y nos da mayor seguridad en nuestras exploraciones, ya que no tenemos que ir a un lejano pueblo para pedir ayuda en caso necesario.

Bien, este artículo está escrito en la sala de espera de un hospital y acabado en casa. He dicho acabado pero no es cierto, seguro que me he dejado muchas cosas y muchos puntos de vista. Si quieres completarlo o complementarlo puedes escribir en el apartado de comentarios.

Salud, dinero, amor y agujeros.